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Cómo lavar de forma más ecológica

Para varias y varios, el olor a ropa limpia es uno de los olores favoritos, mientras que para otros sentir un textil suave, es puro placer. Se puede decir que es una tarea de tipo ritual, por lo que para quienes son ordenados o más metódicos, esto se les da con naturalidad. Dentro del caos de la ropa sucia, separarla según color, tipo de textil o tipo de prenda, puede ser incluso una actividad que te lleve a la calma. Y al mismo tiempo, también hay que considerar algunas implicaciones medioambientales, porque lavar la ropa tiene un mayor impacto en el planeta de lo que piensas. En promedio, un hogar lava casi 300 cargas de ropa cada año, lo que se traduce en más de 22 mil litros de agua.

La mayoría de nosotros usamos telas sintéticas como el poliéster. Nuestras camisas, pantalones e incluso ropa interior se fabrican cada vez con mayor frecuencia con materiales sintéticos, es decir, plástico. Pero estas telas sintéticas, de las que está hecho el 60% de toda la ropa del mundo, tienen un gran problema: cuando se lavan, liberan pequeños pedazos de plástico, llamados microfibras, que fluyen por nuestros desagües, a través de las plantas de tratamiento de agua y a nuestros ríos, lagos y océanos por miles de millones. Pensar en tomar acciones a favor del planeta en esta actividad del hogar es indispensable. Cada esfuerzo suma, y de seguro, por más mínimo que lo sientas, esto puede traducirse en un impacto positivo a largo plazo.

5 TIPS PARA UN LAVADO DE ROPA MÁS SOSTENIBLE

Usa tu ropa más de una vez

Este consejo puede sonar de perogrullo, pero mientras se pueda, usa tu ropa más de una vez. Es una de las formas más sencillas de reducir el impacto del lavado. Si bien no podemos hacerlo con todas las prendas, sí podemos hacerlo con los jeans, por ejemplo. En 2017, un estudiante de la Universidad de Alberta usó unos jeans durante 15 meses seguidos y contenían los mismos niveles de bacterias que cuando los usó durante menos de dos semanas.

Separa las prendas de lavado según tipo (y lee sus etiquetas)

Muchas veces nos enojamos cuando una prenda, que llegó hace poco a nuestras vidas, pierde su calidad, o aparece rota o con el textil dañado en la lavadora. Muchas veces esto puede prevenirse con solo leer las etiquetas (por algo están ahí): cada prenda suele tener instrucciones de lavado al interior. Esto puede prolongar la vida de tus textiles evitando adquirir nuevas prendas.

Utiliza agua fría

El usar agua caliente en el lavado representa hasta el 90 % de la energía necesaria para ejecutar un ciclo. Optar por agua fría no solo ahorrará bastante energía, sino que tu factura de electricidad también será más baja.

Secado natural y lo antes posible

Una buena oportunidad para aprovechar la brisa de esos días calurosos es secando la ropa al aire libre, especialmente esos textiles más voluminosos como chaquetas o ropa de cama. Lo importante, con cualquier tipo de prenda y si quieres evitar planchar, es tender la ropa apenas termine el lavado, sacudiéndola antes de colgar. De lo contrario corre el riesgo de compactarse, arrugarse e incluso tomar un mal olor. Un buen tip es colgar camisas y camiseta en ganchos de ropa para facilitar el planchado (e incluso no planchar). ¿Tienes poco espacio y/o te falta un práctico tendedero? en Casaideas hemos diseñado diversos accesorios de lavado y secado que buscan maximizar el espacio.

Prefiere un detergente más ecológico y carga completa

Cuando estés en el pasillo de detergentes, fíjate que sean biodegradables, sin colorantes o hechos de ingredientes naturales. Y además, se consume menos energía en la lavadora con una carga completa de lavado frente a varias cargas parcialmente llenas. Y si quieres que las manchas salgan con mayor facilidad, te recomendamos que antes del lavado apliques sobre estas una mezcla hecha con ¼ de taza de agua y 4 cucharadas de bicarbonato, escobillando energéticamente.

 

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